Los belenes en las unidades militares
Artículo publicado en la revista ¡Aleluya! nº 10 (2015) de la Asociación Belenista de Valladolid
Desde estas tierras de Valladolid, donde hay gran tradición de belenes, yo, con este pequeño artículo, pretendo añadir una gota de agua más al “río” del belén de la próxima Navidad.
La pregunta de cada año es qué belén voy a colocar, y siempre me propongo hacer algo nuevo porque es lo que más alegría me da, aunque nunca dejo de montar un belén sencillo que me ha acompañado por distintas partes del mundo y que ha sido un recuerdo entrañable para quien estaba lejos de su casa. Todavía muchos soldados me preguntan, “Pater, ¿sigues teniendo las figuras del belén que han dado la vuelta al mundo?”. Se refieren a esas figuras que han recordado en Bosnia, Irak y Líbano, el hecho más importante de la Navidad: el nacimiento de Jesucristo.
En mi vida militar he podido comprobar cómo los belenes dentro de las Unidades tienen un significado muy especial en la familia castrense. Todos los soldados colaboran con sus ideas y su trabajo en la colocación y el diseño del “belén de su cuartel”, grande o pequeño. Siempre surgen diferentes representaciones relacionadas con la actividad del cuartel; de chapa en los “parques de mantenimiento”, en los cuarteles de la isla de Tenerife de la antigua unidad de las COE 81. Los dos itinerarios eran realizados por binomios en tramos de 10 km, aproximadamente, el recorrido nocturno para colocar el belén bajo el mar, en los Cristianos y en la cima del Teide, estaba realizado en una plancha metálica con la silueta de María, José y el Niño en el pesebre y al pie con la inscripción de COE 81. La carrera se realizaba con armamento y equipo, un guerrillero llevaba el belén y el otro un banderín de la unidad.
En esta época no había que pedir permiso ni explicar a nadie, porque estábamos agradecidos por tener la fortuna de nuestra fe. En los hospitales militares había grandes belenes, realizados por las hermanas y los enfermos; y parte de ellos realizados con material reciclado de la sanidad militar.
En la misión del Líbano, “el portal” tuvo la forma de un vehículo blindado, sobre el que se colocaron unos inhibidores de frecuencia; cualquier idea es buena para pasar esos días familiares lo mejor posible, pese a que la mayoría de militares aquí se sienten como en casa.
Barro, migas de pan, cortezas de madera, vainas de los cartuchos, chapas unidas a corchos, bellotas, latas de cerveza y coca cola, son materiales que se han utilizado en el ejército para realizar las figuras de sus belenes. En muchas unidades se promueven concursos que van estimulando cada vez más a nuestros soldados. Son muchos los que a su vez participan en parroquias y en belenes vivientes, donde con sus ropas y su música hacen distintas representaciones de la Navidad.
El belén para la “familia militar” tiene una alegría y un cariño especial. Dentro de las Fuerzas Armadas tenemos grandes jóvenes, con grandes cualidades, que viven esta experiencia desde el sentimiento más profundo de su corazón.
El 25 de diciembre los cristianos celebran el nacimiento de Jesús. En los países occidentales es un día de fiesta para todos, también para los que no concurren a la iglesia. La celebración de nacimiento de Jesús es la fiesta cristiana más importante después de la Pascua. Los evangelios nos dicen que Jesús nació en un establo de Belén, pero no especifican el día.
Los primeros cristianos eligieron para celebrar el nacimiento el 25 de diciembre: en aquella fecha se celebra en Roma la fiesta del solsticio de invierno, para festejar la victoria del sol sobre las tinieblas.
Eligiendo este día para festejar la Navidad, los cristianos querían significar que el verdadero sol, vencedor de las tinieblas del mal, era Jesús. Actualmente es motivo de fiesta para todos. Esta fiesta se prolonga hasta la Epifanía, que recuerda la visita de los Reyes Magos de Oriente al Niño Jesús.
Esperemos que estas Navidades sean para todos motivo de alegría y esperanza, para renovar nuestros corazones con el nacimiento de nuestro salvador.
Ramón García Guardado
Capellán Castrense